¡Hola, potingueras!
Cuando os hablé de la paleta de sombras deSleekOn The Horizon, os comenté que había salido al mismo tiempo que otras dos: Nordic Skies, que tengo por reseñaros, y Goodnight Seewtheart que, en principio, no me llamó tanto la atención, y cuya compra dejé pasar.
Sin embargo, sabía que, al final, caería con ella. Muchas amantes de las paletas de Sleek me la recomendásteis, y, aunque cuando la encontraba en tiendas físicas la toqueteaba y no parecía darme nada nuevo, siempre me quedaba con la cosilla de que tenía algo que debía descubrir, así que aproveché un descuento en su página web, y me la compré.
Pero antes de hablaros de esta paleta, quiero hacer un par de apuntes.
El primero, sobre lo lentísimo que es el envío desde la web de Sleek.
Normalmente los pedidos tardan en llegar un par de semanas, que no es tampoco raudo y veloz, teniendo en cuenta que están a una hora de avión. Pero es que esta vez la paleta se demoró un mes en llegar, que hay pedidos de Aliexpress, que vienen de China, que tardan menos.
El segundo, es sobre la doble subida de precio que nos han hecho durante el último año.
La primera fue evidente, las paletas pasaron de costar 8,50€ a 10,49€, aunque, según en qué páginas, el precio medio era de unos 9€.
La segunda ha sido más sibilina y rastrera, porque, si no te fijas, ni te enteras de que cada sombra ha pasado de ser de 1,1 gramos a 0.8 gramos; es decir, un 20% menos de cantidad.
Si sumamos la primera subida, que ya era un 20%, a la segunda, tenemos el resultado de que estas paletas se han encarecido un 40%, que no es moco de pavo. Nos cobran más, y nos dan menos.
Sleek, te estás portando muy malamente.
Como ya es costumbre en esta marca, no dan explicación de ningún tipo. Ni siquiera se han molestado en hacer publicidad sobre una mejora en su fórmula, si es que la hubiera, ni nada semejante.
Personalmente, no sé deciros si hay o no una mejora, porque hay veces que sacan unas paletas estupendas, y otras es como si dieran un paso atrás. Sobre las últims que tengo no hay queja, pero no hablaré muy alto, por si acaso.
Vamos, que les compramos porque tenemos el hábito adquirido, porque nos gusta el producto, y porque no nos hemos enterado, o no nos hemos querido enterar, pero es como para mosquearse.
Ahora que ya todas somos conscientes de que estamos pagando más, vamos a analizar la paleta de sombras.
Goodnight Sweetheart tiene el encanto de la vecinita (o vecinito, pero la expresión se conoce en femenino) de al lado, que pasa todos los días por tu puerta, y no parece tener nada de especial, pero al final te acaba enamorando.
Pues eso me ha pasado a mí, que el colorido, en principio, me parece más de lo mismo, pero, una vez vas probando cada sombra y vas jugando con sus posibilidades, le ves más y más ventajas.
Son todo sombras minerales en tonos de corte romántico que evocan el misterio de a luz de una vela, según nos cuenta Sleek en la contraportada de su caja. Predominan los matices cálidos y los tonos rosados, y sólo encontraremos dos sombras de acabado mate, muy pigmentadas, por cierto.
Algo que me ha llamado mucho la atención de esta paleta es que muchas de sus sombras, dependiendo con la que la combines, se mimetizan de tal forma que hasta cambian de color. Es más, según en qué zona de la piel las apliques, parecen de un tono o de otro. Esto me crea mucha confusión. No sé si soy yo, o es que realmente sucede así. Las que tengáis esta paleta, por favor, decidme algo al respecto en comentarios.
Por ejemplo, Seduction es una de estas sombras. Cuando la tomo en el dedo, es una sombra metalizada, verdosa grisácea con purpurinas plateadas; pero, al aplicarla sobre la piel, se hace parda, y se transforma en un tono marrón. Las purpurinas, salvo que difumines la sombra, no se caen.
Tiene muy buena pigmentación, pero no es totalmente opaca, permite jugar con prebases o usarla como topper sobre otras.
Velvet Wrap parece mousse al tacto de lo cremosa que es. Tiene un color entre rosado y cobrizo muy bonito, y un acabado metalizado. Es una sombra semitransparente también, pero no se queda en aire si la aplicas sola sobre el párpado.
Romance es una sombra de acabado mate, entre marrón chocolate y vino, que se hace más burdeos al extenderla. Pigmenta muy bien, sobre todo aplicada con pincel en el párpado. Sobre piel en transferencia dedo-mano se queda mucho más discreta de lo que es.
Lingerie tiene un efecto duocromo que, en mi piel, se queda bastante difuso. De subtono rosado, pero con un reflejo metálico dorado y amarillo más que evidente, tampoco es opaca. Si queréis que destaque, usadla con alguna prebase de color debajo. Tiene microdestellitos en dorado y plata, así que no os la recomiendo como iluminador, salvo en el lagrimal.
Dusk tiene un color entre marrón y rosa palo, el dusty rose de toda la vida, que se ve más o menos intenso según la piel donde se pose (dedo, brazo, párpado, aportan distntos resultados). Es de acabado metalizado, pigmenta bien, y tampoco es opaca del todo, pero tiene mucha presencia. Me parece muy versátil y elegante.
L O V E es, quizá, la sombra más transparente de todas. Aporta un velo rosado satinado al párpado, pero no es en absoluto cubriente, es un velo de color. Se pude usar sola para looks make up no make up, o sobre otras para darle un toque distinto. Es de esas que decimos que no pigmentan, pero sí lo hacen, lo que pasa es que no cubre, no tapa la piel, que no es lo mismo.
By The Fireside se parece mucho a Velvet Wrap, sólo que es mucho más cubriente, más intensa, y más pigmentada, pero de color, apenas se distinguen una vez en el párpado, aunque en el dedo es más anaranjada.
Hold Me Tight es la segunda sombra mate de la paleta. De color marrón topo, pigmenta más con pincel sobre el párpado que en el brazo. Es más oscura de lo que se ve en la foto. Ideal para transiciones, crear profundidad, o ahumados de día.
Sweet Dreams es una sombra algo áspera al tacto. De color marrón chocolate, acabado metalizado, y con cierta transparencia, aunque buena cobertura y pigmentación, contiene micropartículas en rosa, dorado, y plata. Sobre una base cremosa negra o marrón es espectacular.
Love Is In The Air es una de esas sombras mutantes que se acaba fundiendo con otras compañeras, y que cambia de aspecto según la luz. En principio, es una sombra muy pigmentada, metalizada, de color entre marrón y violeta apagado que a veces parece incluso gris violáceo. Me fascina esta sombra.
Snuggle es esa sombra duocroma que reconocemos y adoramos cuando la vemos a partes iguales.
De fondo avinatado, y con reflejo verde botella metalizado, es una de las sombras más cambiantes de la paleta. Ella sola viste el párpado. Muy pigmentada, pero con un puntito muy leve de transparencia.
Llegamos a Sleeping Beauty, la otra sombra parda de la paleta. Puede parecer verde apagado, gris, o marrón topo. Tiene destellos muy finos cuando la tomas con el dedo, pero, sorprendentemente, sobre la piel queda, como mucho, ligeramente satinada.
Pigmenta bien, pero tampoco es opaca.
Como habéis podido deducir, la dinámica de estas sombras es la de dejar margen a lucir la propia piel por debajo del maquillaje, jugando con un tanto de transparencia. En unas se nota más que en otras, pero es algo que ya han hecho otras veces con otras paletas, aunque, en mi opinión, no con tanto acierto, porque en esta ocasión sólo hay un par de sombras evidentemente traslúcidas, y el resto tiene potencia como para modularlas según qué efecto queramos conseguir.
De todas formas, mañana veremos a algunas de ellas en acción para que se entienda mejor esto.
¿Qué os ha parecido Goodnight Sweetheart?¿La tenéis?¿Os habíais dado cuenta de la segunda jugada con el precio de las paleas de Sleek?¿Qué os parece este comportamiento?¿Soléis comprar paletas de sombras de esta marca, potingueras?
Cuando os hablé de la paleta de sombras deSleekOn The Horizon, os comenté que había salido al mismo tiempo que otras dos: Nordic Skies, que tengo por reseñaros, y Goodnight Seewtheart que, en principio, no me llamó tanto la atención, y cuya compra dejé pasar.
Sin embargo, sabía que, al final, caería con ella. Muchas amantes de las paletas de Sleek me la recomendásteis, y, aunque cuando la encontraba en tiendas físicas la toqueteaba y no parecía darme nada nuevo, siempre me quedaba con la cosilla de que tenía algo que debía descubrir, así que aproveché un descuento en su página web, y me la compré.
Pero antes de hablaros de esta paleta, quiero hacer un par de apuntes.
El primero, sobre lo lentísimo que es el envío desde la web de Sleek.
Normalmente los pedidos tardan en llegar un par de semanas, que no es tampoco raudo y veloz, teniendo en cuenta que están a una hora de avión. Pero es que esta vez la paleta se demoró un mes en llegar, que hay pedidos de Aliexpress, que vienen de China, que tardan menos.
El segundo, es sobre la doble subida de precio que nos han hecho durante el último año.
La primera fue evidente, las paletas pasaron de costar 8,50€ a 10,49€, aunque, según en qué páginas, el precio medio era de unos 9€.
La segunda ha sido más sibilina y rastrera, porque, si no te fijas, ni te enteras de que cada sombra ha pasado de ser de 1,1 gramos a 0.8 gramos; es decir, un 20% menos de cantidad.
Si sumamos la primera subida, que ya era un 20%, a la segunda, tenemos el resultado de que estas paletas se han encarecido un 40%, que no es moco de pavo. Nos cobran más, y nos dan menos.
Sleek, te estás portando muy malamente.
Como ya es costumbre en esta marca, no dan explicación de ningún tipo. Ni siquiera se han molestado en hacer publicidad sobre una mejora en su fórmula, si es que la hubiera, ni nada semejante.
Personalmente, no sé deciros si hay o no una mejora, porque hay veces que sacan unas paletas estupendas, y otras es como si dieran un paso atrás. Sobre las últims que tengo no hay queja, pero no hablaré muy alto, por si acaso.
Vamos, que les compramos porque tenemos el hábito adquirido, porque nos gusta el producto, y porque no nos hemos enterado, o no nos hemos querido enterar, pero es como para mosquearse.
Ahora que ya todas somos conscientes de que estamos pagando más, vamos a analizar la paleta de sombras.
Goodnight Sweetheart tiene el encanto de la vecinita (o vecinito, pero la expresión se conoce en femenino) de al lado, que pasa todos los días por tu puerta, y no parece tener nada de especial, pero al final te acaba enamorando.
Pues eso me ha pasado a mí, que el colorido, en principio, me parece más de lo mismo, pero, una vez vas probando cada sombra y vas jugando con sus posibilidades, le ves más y más ventajas.
Son todo sombras minerales en tonos de corte romántico que evocan el misterio de a luz de una vela, según nos cuenta Sleek en la contraportada de su caja. Predominan los matices cálidos y los tonos rosados, y sólo encontraremos dos sombras de acabado mate, muy pigmentadas, por cierto.
Algo que me ha llamado mucho la atención de esta paleta es que muchas de sus sombras, dependiendo con la que la combines, se mimetizan de tal forma que hasta cambian de color. Es más, según en qué zona de la piel las apliques, parecen de un tono o de otro. Esto me crea mucha confusión. No sé si soy yo, o es que realmente sucede así. Las que tengáis esta paleta, por favor, decidme algo al respecto en comentarios.
Por ejemplo, Seduction es una de estas sombras. Cuando la tomo en el dedo, es una sombra metalizada, verdosa grisácea con purpurinas plateadas; pero, al aplicarla sobre la piel, se hace parda, y se transforma en un tono marrón. Las purpurinas, salvo que difumines la sombra, no se caen.
Tiene muy buena pigmentación, pero no es totalmente opaca, permite jugar con prebases o usarla como topper sobre otras.
Velvet Wrap parece mousse al tacto de lo cremosa que es. Tiene un color entre rosado y cobrizo muy bonito, y un acabado metalizado. Es una sombra semitransparente también, pero no se queda en aire si la aplicas sola sobre el párpado.
Romance es una sombra de acabado mate, entre marrón chocolate y vino, que se hace más burdeos al extenderla. Pigmenta muy bien, sobre todo aplicada con pincel en el párpado. Sobre piel en transferencia dedo-mano se queda mucho más discreta de lo que es.
Lingerie tiene un efecto duocromo que, en mi piel, se queda bastante difuso. De subtono rosado, pero con un reflejo metálico dorado y amarillo más que evidente, tampoco es opaca. Si queréis que destaque, usadla con alguna prebase de color debajo. Tiene microdestellitos en dorado y plata, así que no os la recomiendo como iluminador, salvo en el lagrimal.
Dusk tiene un color entre marrón y rosa palo, el dusty rose de toda la vida, que se ve más o menos intenso según la piel donde se pose (dedo, brazo, párpado, aportan distntos resultados). Es de acabado metalizado, pigmenta bien, y tampoco es opaca del todo, pero tiene mucha presencia. Me parece muy versátil y elegante.
L O V E es, quizá, la sombra más transparente de todas. Aporta un velo rosado satinado al párpado, pero no es en absoluto cubriente, es un velo de color. Se pude usar sola para looks make up no make up, o sobre otras para darle un toque distinto. Es de esas que decimos que no pigmentan, pero sí lo hacen, lo que pasa es que no cubre, no tapa la piel, que no es lo mismo.
By The Fireside se parece mucho a Velvet Wrap, sólo que es mucho más cubriente, más intensa, y más pigmentada, pero de color, apenas se distinguen una vez en el párpado, aunque en el dedo es más anaranjada.
Hold Me Tight es la segunda sombra mate de la paleta. De color marrón topo, pigmenta más con pincel sobre el párpado que en el brazo. Es más oscura de lo que se ve en la foto. Ideal para transiciones, crear profundidad, o ahumados de día.
Sweet Dreams es una sombra algo áspera al tacto. De color marrón chocolate, acabado metalizado, y con cierta transparencia, aunque buena cobertura y pigmentación, contiene micropartículas en rosa, dorado, y plata. Sobre una base cremosa negra o marrón es espectacular.
Love Is In The Air es una de esas sombras mutantes que se acaba fundiendo con otras compañeras, y que cambia de aspecto según la luz. En principio, es una sombra muy pigmentada, metalizada, de color entre marrón y violeta apagado que a veces parece incluso gris violáceo. Me fascina esta sombra.
Snuggle es esa sombra duocroma que reconocemos y adoramos cuando la vemos a partes iguales.
De fondo avinatado, y con reflejo verde botella metalizado, es una de las sombras más cambiantes de la paleta. Ella sola viste el párpado. Muy pigmentada, pero con un puntito muy leve de transparencia.
Llegamos a Sleeping Beauty, la otra sombra parda de la paleta. Puede parecer verde apagado, gris, o marrón topo. Tiene destellos muy finos cuando la tomas con el dedo, pero, sorprendentemente, sobre la piel queda, como mucho, ligeramente satinada.
Pigmenta bien, pero tampoco es opaca.
Como habéis podido deducir, la dinámica de estas sombras es la de dejar margen a lucir la propia piel por debajo del maquillaje, jugando con un tanto de transparencia. En unas se nota más que en otras, pero es algo que ya han hecho otras veces con otras paletas, aunque, en mi opinión, no con tanto acierto, porque en esta ocasión sólo hay un par de sombras evidentemente traslúcidas, y el resto tiene potencia como para modularlas según qué efecto queramos conseguir.
De todas formas, mañana veremos a algunas de ellas en acción para que se entienda mejor esto.
¿Qué os ha parecido Goodnight Sweetheart?¿La tenéis?¿Os habíais dado cuenta de la segunda jugada con el precio de las paleas de Sleek?¿Qué os parece este comportamiento?¿Soléis comprar paletas de sombras de esta marca, potingueras?