Cada vez que os presento un producto de Clarins en el blog se me plantea el dilema de cómo titular el post, porque tengo tantas cosas que contaros, tantas impresiones, tanta información, ¡que no cabe todo en una frase!
Y es que soy muy fan de esta marca, porque Clarins conquista. Investiga, escucha y adapta sus productos a las necesidades de sus consumidoras, y eso les hace grandes y cercanos a un tiempo.
Hoy quiero hablaros del Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins, un desmaquillante en crema de última generación del que no vas a poder prescindir si lo pruebas; y, si prescindes, difícilmente lo olvidarás.
Es un desmaquillante especialmente indicado para pieles sensibles y reactivas, aunque no lo veo para pieles grasas. Recordad que este tipo de desmaquillante se recomienda en caso de pieles desde normales a secas y muy secas.
En cuanto a edad, tampoco creo que tenga un límite. Es más, si tu piel es sensible, cuanto antes empieces a cuidarla, mejor vida tendréis las dos; pero para pieles a partir de los 30 años de edad en adelante, sobre todo si tenéis signos de fatiga, la veo ideal.
¿Y qué tiene de especial el Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins? Muchas cosas, y todas buenas. Os cuento.
Para comenzar, el efecto detoxificante y protector de la piel frente a las toxinas y la polución del ambiente.
Ya en 1991 Clarins se pone en marcha ante la alerta de peligro de estos factores para la piel, y comienza a trabajar, abriendo una vía pionera en el mercado en ese momento con su complejo anticontaminación, que se irá integrando en todos los productos de Clarins (bases, tratamientos, etc) y que irá mejorando poco a poco, según avancen los descubrimientos cosmetológicos con el tiempo.
En 2014, Clarins considera que la polución es un peligro real y palpable para la piel y lanza un producto específico para combatirla: el Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins.
Es un todo en uno, una crema mágica y gustosa que, mientras cubre y acaricia nuestra piel, la desmaquilla y la nutre, la reconforta y la refuerza, y le devuelve su luz, y su belleza en un gesto que descontamina y detoxifica a un tiempo, dejando una sensación de frescor, limpieza, y cuidado a un tiempo espectacular.
Cuando la retiras, es como si hubieras saltado directamente de la limpieza a la aplicación de la crema de noche, porque la sensación es esa, la de tener la piel super limpia y no necesitar ni pasar por el paso del agua y aplicar la crema; aunque lo ideal es pasar por el agua; ya que toda la porquería que portaba la piel se ha quedado en la superficie, impregnada en la crema, y hay que retirarla para que el efecto descontaminante sea real.
El componente estrella de este desmaquillante es el extracto de semilla de moringa, el árbol de la vida africano (o el árbol de los milagros en India) que tiene propiedades desintoxicantes (incluso hay infusiones de moringa con esta misma propiedad)
Sobre el extracto de moringa cada vez se sabe más, tiene múltiples propiedades, y todas ellas muy interesantes.
Acompañando al extracto de moringa, encontramos en la fórmula del Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins tensioactivos suaves y efectivos que ayuden a retirar cualquier tipo de impureza, maquillaje, y sebo cutáneo, respetado las pieles más sensibles; extracto de manzanilla que reconforta; y, bioecolia (oligosacárido obtenido a partir de azúcares naturales) para restablecer el equilibrio biológico cutáneo preservando la juventud de la piel.
La textura de este Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins es untuosa, muy gustosa, y está diseñada para cubrir las necesidades de confort y nutrición de pieles sensibles y debilitadas, y por eso contiene manteca y aceites vegetales de jojoba, mango y karité.
Además, incluye un extracto de limón que neutraliza el efecto desecante de la cal del agua para que, cuando nos enjuaguemos, la piel quede limpia, flexible, suave y luminosa. Y lo consigue.
La aplicación es bastante curiosa.
Desde Clarins nos indican que hay que depositar una cantidad de producto entre las manos, calentarla, y aplicarla en forma de capa sobre la superficie de la piel. Después, en vez de masajearla, se posan las manos abiertas sobre la piel y se retiran rápido, como si fuera una ventosa, para despegar las impurezas y no estarlas restregando por el rostro.
Para finalizar, podemos retirar la crema desmaquillante con un pañuelo o algodón, pasar otro con loción micelar, enjuagarnos, o lo que más nos guste, tonificar, e hidratar.
El Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins no es un producto económico, cuesta unos 35€ los 200 ml. Ahora, que merece la pena probarlo, ya lo creo que sí.
Yo me plantearía tener este desmaquillante para esos días en los que la piel protesta más, y otro más básico como habitual. Incluso podemos incluirlo en ese par de días de la semana en los que nos gustaría hacernos una mascarilla pero no tenemos tiempo ni fuerzas, y así sumamos los dos días de uso de este desmaquillante con los dos de mascarillas, y le ganamos 4 en vez de dos a los 7 semanales.
Combinaciones y usos, hay los que cada una quiera inventarse.
A mi, desde luego, me ha encantado.
¿Probaréis el Desmaquillante Suave Anti-Polución Confort Extremo de Clarins, potingueras?
