Van apareciendo las novedades de otoño y, entre ellas, está un nuevo corrector iluminador de Clarins, el Instant Concealer, un tratamiento antiojeras con una fórmula que ataca en varios frentes el aspecto de cansancio que a veces acusa esta delicada zona del rostro.
Tiene efecto defatigante gracias al complejo Light-Optimizing+ exclusivo de Clarins, que asocia pigmentos correctores que interactúan con el color de la ojera, iluminando la mirada.
Es decir; corrige, pero no es mate, sino que tiene cierto componente reflectante de la luz que hace que, al verse luminosa -no como una luciérnaga, pero sí satinada-, parezca que tenemos la ojera igualada con el resto de la piel, y la mirada más descansada.
Personalmente, me gusta cómo queda, porque no es muy exagerado, pero, si fuera más mate, me gustaría más, porque una tiene bolsas -unos días más que otros- y tengo que ir con cuidado de no tocarla para que no se me note más cuando utilizo este corrector.
También es alisante. Tiene una textura crema enriquecida con extracto de aloe, aportando suavidad y bienestar a la piel. Alisa y reconforta el contorno del ojo.
En este aspecto, es sensacional. Notas cómo el ojo te descansa al poquito de habértelo aplicado, la piel se nota más lisa, más descongestionada, hidratada sin resultar resbaladiza o grasa, ...Notas que te cuida el contorno del ojo.
Para luchar contra las ojeras, contiene extracto de cafeína, reconocido por su poder estimulante de la microcirculación cutánea, y por su acción descongestionante. Corrige las marcas de cansancio y atenúa las bolsas.
No las hace desaparecer del todo, pero sí que se deshinchan algo al poco de aplicarlo. Si lo usamos de contínuo, es como si nos aplicáramos un tratamiento con color, porque sí que baja el volumen de las bolsas (no del todo, los milagros a Lourdes y pagando, pero se nota el cambio)
Tiene una cobertura media-alta, es modulable, no se hace pesado, se trabaja y se difumina muy bien, aguanta largas jornadas sin parchear ni desaparecer, y es reaalmente gustoso de utilizar.Además, es muy hidratante y deja la zona del contorno de ojos maravillosamente bien, tersa, elástica, suave,...
Como ya he dicho, si fuera un poco menos satinado, sería perfecto, pero, aún siendo así, tampoco me parece mal, al contrario, estoy encantada con él.
Para que podáis apreciar el efecto del Instant Concealer de Clarins, decidí hacerme las fotos cuando llevaba 4 días tosiendo como si no hubiera un mañana (gracias personas que ponéis los aires acondicionados a toda pastilla cuando no es necesario y provocáis que se resequen las mucosas, gracias)
Vamos, que tenía una cara de resucitada que daba pena verla; así que decidí que, si en ese trance conseguía que pareciera que estaba despierta, no podría haber una mejor prueba.
 |
| Aquí el zombie |
Con respecto a los tonos, hay 4 disponibles:
01, recomendado para ojeras azuladas y/o pieles claras. Es el que yo uso y se me ajusta perfectamente.
02, recomendado para ojeras marrones/violáceas y pieles medias/morenas. Es algo anaranjado. A mi me queda como barro.
03 y 04, recomendado para ojeras marrones/negras y pieles oscuras. Ni me atrevo a probarlo.
El Instant Concealer de Clarins aparece en un formato de tubo de plástico opaco con boquilla fina, contiene 15 ml, y cuesta 26,50€.
Teniendo en cuenta que, como ya he dicho antes, es una especie maquillaje de tratamiento (si no existe el concepto, lo acuñamos ya), y que es necesaria una cantidad mínima para cubrir las dos ojeras, para mi, no es caro.
¿A vosotras qué os parece?¿Os gusta el resultado del Instant Concealer de Clarins?¿Lo habéis probado ya, potingueras?