¡Hola, potingueras!
Hoy nos toca hablar de pies; más concretamente, de una nueva herramienta que ha creado Dr. Scholl para que nos los cuidemos un poquito más, de forma cómoda, rápida, y sencilla.
Se trata de la lima Velvet Smooth, un aparatito con una presentación impecable que funciona con 4 pilas AA y que de ja los pies suaves en un momentito.
El aparatito en sí está muy bien pensado y no deja detalle al azar.
A mi me llegó en una caja-cofre de cartón duro con cierre de imanes para que la podamos guardar protegida de posibles golpes.
Si alguna falta le tengo que sacar, es que, quizá, la caja es algo grande para la lima, pero esto ya es ponerse exquisitos.
Creo que esta caja no es la que está a la venta, sino la que nos han dado a las probadoras, pero todo es preguntarlo.
El cabezal aparece protegido con una pieza de plástico que podemos poner y quitar a voluntad, en la que nos indican que no metamos la parte de las baterías en agua. Es decir, es mejor que lo utilicéis donde podáis tener las manos secas.
Las pilas se colocan en la parte baja del aparato. Sólo hay que desenroscar la pieza inferior, cargarlo, y cerrarlo.
Trae un cabezal de repuesto para cuando se nos desgaste el primero. Estos cabezales también se venden de forma individual aparte y se pueden lavar bajo el agua del grifo.
Cada cabezal tiene una vida estimada de un año, siendo aconsejable su uso una vez cada 15 días.
También hay packs de dos cabezales por si se quiere compartir el aparato con algún familiar y que cada uno tenga su disco de lima. Tiene un precio de 14,95€.
Para cambiarlo, en caso de ser necesario, tenemos un botoncito en un lateral de la pieza blanca que debemos presionar un poquito para que expulse el cabezal que está inserto en el aparato Velvet Smooth.
La puesta en marcha es muy sencilla. Sólo hay que deslizar un poquito la pieza gris central para que la lima comience a girar.
Con respecto a la experiencia con el Velvet Smooth, ha sido bastate curiosa, pero agradable.
Suelo ser bastante reticente a acercar determinados útiles que giran rápido a mi piel (digamos que a la única que se lo consiento sin desconfianza es a la depiladora y porque la conozco desde hace años), y la Velvet Smooth no iba a ser menos.
Me pensé mucho el momento de arrimar la lima giratoria a mis pies.
¿Y si era muy agresiva? ¿Y si me hacía daño? ¿Y si no era capaz de controlarla bien?
Muchos "y si..." que no van a ningún sitio. Las cosas hay que probarlas. Y eso hice.
Me preparé un baño de pies, me los sequé bien, y puse en marcha el aparatito.
Me resultó muy sencillo de manejar y lima sin que te des cuenta. Ves cómo va saliendo el polvillo en el que se convierten tus durezas, pero no notas nada más que una caricia en tus pies -de hecho, en algunas zonas te puede hacer cosquillas-, hasta que retiras el Velvet Smooth y te los tocas. Los pies parecen seda.
Yo lo hago con los pies secos, pero se puede hacer con ellos en húmedo. Yo prefiero secármelos antes porque en mojado es más fácil llevarse parte de piel que no se debe.
Lo que sí os tengo que comentar es que las zonas de durezas las alisa muy bien y en pocos segundos, pero si tenéis algún área donde la piel está rota (se os están pelando los pies, queda pare de piel de una antigua ampolla que ya se rompió, etc), no la retira. Al menos, no en mi caso.
Eso quiere decir que sólo ataca las zonas de piel seca, y es garantía de que no os agarrará piel que no sea así, evitando posibles pellizcos y heridas. A mi me parece una medida de seguridad estupenda.
Es una herreamienta manejable, aunque pesa por las pilas que lleva. Yo pensaba que iba a ser más aparatoso, pero no.
Por otra parte, hace ruido. Y a mi lo que hace ruido, me da perecita. Esto deberían mejorarlo, porque es bastante desagradable para oídos sensibles. Sólo dura unos segundos, pero no os voy a decir que es un canto de sirena cuando no lo es.
El Velvet Smooth tiene un coste de unos 35-40€ aproximadamente y podéis encontrarlo en todos los puntos de venta de Dr. Scholl: farmacias, parafarmacias, tiendas de cuidado especializado de los pies, etc.
Si me decidí a probar el Velvet Smooth es porque Dr. Scholl está especializada en el cuidado de los pies desde hace 100 años y siempre renuevan sus productos buscando eficacia y eficiencia, adaptándose a problemas y necesidades de un público cada vez más exigente.
Me ha encantado la experiencia y, aunque haga ese ruidito que os comentaba, creo que merece la pena tener un aparatito que te da un tratamiento profesional a un precio razonable (si cuidas la lima, te puede durar años)
Algo que quería comentaros antes de terminar el post es que las que seáis diabéitcas debéis leer muy bien la cajita, porque parece ser que lleva algo que os puede perjudicar. Yo en esto no había reparado hasta que Iris lo advirtio en este vídeo, así que, por si alguien no lo ha visto, os lo dejo enlazado.
Ella se quejaba de que es un detalle que no había visto en las reseñas de otras compañeras blogueras, pero es que hay que entender que hay información que, salvo que te afecte directamente, se te puede pasar.
¿Conocíais Dr. Scholl?¿ Y el Velvet Smooth?¿Qué os parece este invento, potingueras?
Hoy nos toca hablar de pies; más concretamente, de una nueva herramienta que ha creado Dr. Scholl para que nos los cuidemos un poquito más, de forma cómoda, rápida, y sencilla.
Se trata de la lima Velvet Smooth, un aparatito con una presentación impecable que funciona con 4 pilas AA y que de ja los pies suaves en un momentito.
El aparatito en sí está muy bien pensado y no deja detalle al azar.
A mi me llegó en una caja-cofre de cartón duro con cierre de imanes para que la podamos guardar protegida de posibles golpes.
Si alguna falta le tengo que sacar, es que, quizá, la caja es algo grande para la lima, pero esto ya es ponerse exquisitos.
Creo que esta caja no es la que está a la venta, sino la que nos han dado a las probadoras, pero todo es preguntarlo.
El cabezal aparece protegido con una pieza de plástico que podemos poner y quitar a voluntad, en la que nos indican que no metamos la parte de las baterías en agua. Es decir, es mejor que lo utilicéis donde podáis tener las manos secas.
Las pilas se colocan en la parte baja del aparato. Sólo hay que desenroscar la pieza inferior, cargarlo, y cerrarlo.
Trae un cabezal de repuesto para cuando se nos desgaste el primero. Estos cabezales también se venden de forma individual aparte y se pueden lavar bajo el agua del grifo.
Cada cabezal tiene una vida estimada de un año, siendo aconsejable su uso una vez cada 15 días.
También hay packs de dos cabezales por si se quiere compartir el aparato con algún familiar y que cada uno tenga su disco de lima. Tiene un precio de 14,95€.
Para cambiarlo, en caso de ser necesario, tenemos un botoncito en un lateral de la pieza blanca que debemos presionar un poquito para que expulse el cabezal que está inserto en el aparato Velvet Smooth.
La puesta en marcha es muy sencilla. Sólo hay que deslizar un poquito la pieza gris central para que la lima comience a girar.
Con respecto a la experiencia con el Velvet Smooth, ha sido bastate curiosa, pero agradable.
Suelo ser bastante reticente a acercar determinados útiles que giran rápido a mi piel (digamos que a la única que se lo consiento sin desconfianza es a la depiladora y porque la conozco desde hace años), y la Velvet Smooth no iba a ser menos.
Me pensé mucho el momento de arrimar la lima giratoria a mis pies.
¿Y si era muy agresiva? ¿Y si me hacía daño? ¿Y si no era capaz de controlarla bien?
Muchos "y si..." que no van a ningún sitio. Las cosas hay que probarlas. Y eso hice.
Me preparé un baño de pies, me los sequé bien, y puse en marcha el aparatito.
Me resultó muy sencillo de manejar y lima sin que te des cuenta. Ves cómo va saliendo el polvillo en el que se convierten tus durezas, pero no notas nada más que una caricia en tus pies -de hecho, en algunas zonas te puede hacer cosquillas-, hasta que retiras el Velvet Smooth y te los tocas. Los pies parecen seda.
Yo lo hago con los pies secos, pero se puede hacer con ellos en húmedo. Yo prefiero secármelos antes porque en mojado es más fácil llevarse parte de piel que no se debe.
Lo que sí os tengo que comentar es que las zonas de durezas las alisa muy bien y en pocos segundos, pero si tenéis algún área donde la piel está rota (se os están pelando los pies, queda pare de piel de una antigua ampolla que ya se rompió, etc), no la retira. Al menos, no en mi caso.
Eso quiere decir que sólo ataca las zonas de piel seca, y es garantía de que no os agarrará piel que no sea así, evitando posibles pellizcos y heridas. A mi me parece una medida de seguridad estupenda.
Es una herreamienta manejable, aunque pesa por las pilas que lleva. Yo pensaba que iba a ser más aparatoso, pero no.
Por otra parte, hace ruido. Y a mi lo que hace ruido, me da perecita. Esto deberían mejorarlo, porque es bastante desagradable para oídos sensibles. Sólo dura unos segundos, pero no os voy a decir que es un canto de sirena cuando no lo es.
El Velvet Smooth tiene un coste de unos 35-40€ aproximadamente y podéis encontrarlo en todos los puntos de venta de Dr. Scholl: farmacias, parafarmacias, tiendas de cuidado especializado de los pies, etc.
Si me decidí a probar el Velvet Smooth es porque Dr. Scholl está especializada en el cuidado de los pies desde hace 100 años y siempre renuevan sus productos buscando eficacia y eficiencia, adaptándose a problemas y necesidades de un público cada vez más exigente.
Me ha encantado la experiencia y, aunque haga ese ruidito que os comentaba, creo que merece la pena tener un aparatito que te da un tratamiento profesional a un precio razonable (si cuidas la lima, te puede durar años)
Algo que quería comentaros antes de terminar el post es que las que seáis diabéitcas debéis leer muy bien la cajita, porque parece ser que lleva algo que os puede perjudicar. Yo en esto no había reparado hasta que Iris lo advirtio en este vídeo, así que, por si alguien no lo ha visto, os lo dejo enlazado.
Ella se quejaba de que es un detalle que no había visto en las reseñas de otras compañeras blogueras, pero es que hay que entender que hay información que, salvo que te afecte directamente, se te puede pasar.
¿Conocíais Dr. Scholl?¿ Y el Velvet Smooth?¿Qué os parece este invento, potingueras?