No sé si a vosotras os habrá pasado alguna vez eso de compraros una cosita que te haya entrado por los ojos, dejarla preparada para usarla al día siguiente, que ese día tus tareas se líen, el siguiente también, no lo estrenas, lo guardas, se te olvida, y, un buen día, revisando cajones, te lo encuentras allí, sonriente, esperando para ser, por fin, admitido en la familia como se merece.
A mi sí, más de una vez, además, y me da cierto coraje; pero también recibo ese nuevo encuentro, esa oportunidad, con mucha alegría.
Eso me sucedió a mi con estas dos paletitas de sombras que compré hace tiempo en un bazar oriental, y que he redescubierto y estrenado este invierno.
Como podéis apreciar, cada una de estas paletas contiene 7 sombras de forma rectangular, con relieve de tejido de punto, y con estilos muy diferentes.
No tienen nombre, sólo un número como referencia. La de tonos cobres y neutros es la nº 1, y la de tonos Denim, la 4.
Cada una de estas paletas contiene 17 gramos de producto, así que son sombras bastante abundantes. Su precio creo que no llegó a los 2€ cada una.
Sé que muchas no sois amigas de este tipo de cosmética low cost, pero yo ahí no voy a entrar. Cada cual que compre y use lo que mejor le parezca.
Todas las sombras de estas dos paletas tienen una pigmentación bastante buena, no son tizosas, no se deshacen, y, con una prebase, te aguantan casi todo el día. Se difuminan bien, y se puede graduar su intensidad. Las micropurpurinas que tienen algunas de estas sombras no se van cayendo según pasan las horas.
Paleta 1, Casi Neutra:
Tenemos una sombra gris oscura satinada:
Una sombra gris perla satinada también:
Una blanca mate que pigmenta bastante bien, y que da mucho juego usándola en el lagrimal como punto de luz:
Un morado berenjena casi mate. Es la única que suelta un pelín de polvillo, pero, al arrastrarla, se integra, así que no cuenta como polvorienta:
Un cobre metalizado. No es totalmente opaca, pero pigmenta bien:
Un dorado terroso, satinada:
Y una sombra cobre más anaranjada que la primera de este estilo, más metalizada, algo perlada, más cubriente, y más pigmentada:
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| swatches en transferencia con dedo y sin prebase |
Paleta 4, Tonos Denim:
Las sombras de esta paleta me recuerdan a un pantalón vaquero. Azules para la tela; verdosos, marrones y mostaza para remaches y cremallera; y blanco para los hilos.
Comenzamos por la sombra blanca mate, igual que la de la paleta anterior:
Seguimos por un tono mostaza metalizado precioso, que contiene micropurpurinas, y posee cierto subtono verdoso:
Azul celeste metalizado ligeramente perlado. No es del todo cubriente, pero, con un par de aplicaciones, se opaca sin problema:
Verde oliva bronce, metálico, intenso, y muy pigmentado. Es la segunda sombra más especial de esta paleta:
Azul claro, apagado, satinado. Pigmenta menos que las otras, pero se le puede sacar partido con un poquito de insistencia y prebase:
Azul piscina mate. Es la única que pincha en pigmentación, al menos, si la usamos en arrastre. Si la aplicamos a toques, podemos sacarle jugo:
Marrón bronce, metalizado, intenso, pigmentado, cubriente. Puede parecer que se deshace, pero es de lo cremosa que resulta. No suelta polvillo al aplicarla:
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| swatches realizados en transferencia sobre piel limpia y seca, con el dedo, y sin prebase |
Como podéis apreciar, son paletitas de tonos muy apañaditos. Yo reconozco que tengo debilidad por la de tonos denim, pero la otra es mucho más versátil para looks de diario.
No es que sean las mejores sombras del mundo, pero son curiosas y monas, y me apetecía compartirlas con vosotras.
¿Vosotras con cuál os quedáis?¿Tenéis algún producto low cost con historia?¿Nos lo mostráis, potingueras?