¡Hola, potingueras!
De nuevo, vamos a hablar hoy de un producto de la línea de cuidado profesional de la firma polaca Beauty Face, de venta en OnlineCosmeticos.es.
Se trata de un par de mascarillas de la línea Mooya Complete Effect Pro, aunque para abreviar me referiré a ellas como Mooya Pro.
Dentro de esta línea profesional, hemos conocido las mascarillas de colágeno en formato de careta de hidrogel, los parches de colágeno para ojos, y los serums de la línea Active Skin Concentrate. Todos estos productos los podéis revisar accediendo a sus correspondientes enlaces.
Hasta la fecha, estoy muy satisfecha con los resultados de todos los productos Beauty Face que he probado, aunque reconozco que, muchas veces, sus texturas, formatos, y formas de aplicación, me han descolocado un poco; pero, si me atengo a resultados, creo que es hora de eliminar resistencias, y animarse a probar otros protocolos de cuidado facial.
Hoy me voy a centrar en dos de las mascarillas Mooya Pro de las que dispone la marca Beauty Face, y que, cómo no, también tienen sus peculiaridades.
La línea Mooya Complete Effect Pro es una línea profesional, como os he comentado antes. Es innovadora, y contiene agentes altamente activos para conseguir los mejores resultados. Basándose en la biotecnología, busca un efecto similar al que se obtendría con máquinas, pero sin ser invasivo.
Comprende 8 tipos de tratamiento que contemplan todos los rangos de edad, desde los 25 a los 65 años. En principio, estaremos utilizando unas mascarillas cuyas concentraciones de activos sólo las pueden aplicar profesionales por su alta carga en los mismos; eso sí, en la comodidad de nuestro hogar.
Cada sobre de Mooya Pro contiene una mascarilla en dos fases o pasos.
La primera parte consiste en una careta de celulosa que abarca rostro, mentón, cuello, y hasta orejas, porque tiene un par de troqueles que se insertan en ellas para ajustar la careta al máximo y evitar que se mueva.
Personalmente, a mí estos troqueles me resultan molestos, porque tengo las orejas pequeñitas y muy pegadas a la cabeza, y tener algo tirante en ellas me es incómodo, aunque, una vez a la semana, puede soportarse.
También el fragmento del cuello tiene una posible mejora, y es que, o lo atas tras la nuca, o esos cabos quedan sueltos y se pueden mover si no estás tumbada. En cualquier caso, tener algo frío y húmedo en la nuca a mí no me resulta agradable, al menos, no mientras no haga más calor.
Lo que sí me gusta es que el contorno del ojo queda muy ajustado, y así también se beneficia de la aplicación de la mascarilla durante el uso de la careta.
Por supuesto, estamos irreconocibles con la careta puesta, así que, si no queréis provocarle un ataque a nadie, usadlas cuando estéis solitas, o avisadles antes de entrar en la estancia.
Tonterías aparte, las mascarillas Mooya Pro vienen muy bien impregnadas, tienen buena calidad y no se rompen fácilmente, y la adaptación a la forma del rostro es bastante buena.
Se aplican tras la limpieza de la piel, durante 20 o 30 minutos, y luego se retiran, se masajea el líquido remanente, y prodecemos a descubrir qué se esconde tras el sobrecito número dos.
En realidad, el paso número dos es un serum tipo crema que se puede repartir en varios usos. De hecho, hay producto suficiente como para una semana, más o menos, y sin ser tacaña en la aplicación. A mí, esta parte de serum cremoso, es la que realmente me da la sensación de mascarilla, y tener mascarilla para casi toda la semana, de esta calidad, con un solo sobre, me parece estupendo al precio que tiene (7,99€)
Tiene un tacto parecido a una crema microaireada, casi de mousse, y, al aplicarla, tiene una sensación parecida a las prebases siliconadas, pero sin el efecto careta que dejan éstas.
Se nota cómo rellena y reconforta la piel al momento, la alisa, la hidrata, y le da un aspecto más joven y descansado.
Con respecto al serum, en la página dice que hay que aplicarlo un máximo de 10 minutos tras la retirada de la careta. Yo no entiendo si es el tiempo máximo a dejar pasar entre careta y serum, o el tiempo máximo de exposición al serum.
En cualquier caso, como tengo tendencia a hacer las cosas como Thor, o el que esté de guardia ese día, me dé a entender, yo suelo aplicarme una capita del serum como si fuera una crema espesita, y dejo que se absorba solita. No sólo no he notado problemas, irritaciones, o sobrecargas en la piel, sino que me la he encontrado estupenda toda la semana.
Respecto a las mascarillas Mooya Pro que he probado, me he centrado en mi principal problema, que suele ser la deshidratación.
Primero probé la Mooya Pro Estimulante de la Acuaporina.
Es una mascarilla antiedad apta para cualquier rango de edad, especialmente destinada a pieles secas, deshidratadas, o con problemas de hidratación.
Estimula la actividad de las acuaporinas, las proteínas mediadoras del transporte de agua de la piel. Así obtenermos una hidratación hacia dentro, y hacia fuera.
Restaura la barrera lipídica, reconforta la piel eliminando la sensación de tensión, hidrata y protege contra la pérdida de agua, mejora la flexibilidad y elasticidad de la piel, la suaviza, la alisa, y le da un aspecto más joven y luminoso, más descansado.
Me fascina el serum de esta mascarilla, me parece de lo mejorcito que he probado. Y, además, cumple con todo lo que promete.
La siguiente mascarilla que he utilizado es la Mooya Pro Relleno Hialurónico +25.
También está especialmente destinada a pieles secas, deshidratadas, o con problemas de hidratación. Se recomienda a partir de los 25 años de edad.
Proporciona una hidratación intensa, reconstruye la capa protectora de la piel, incrementa la firmeza y la elasticidad, disminuye el aspecto de las arrugas finas y superficiales, alisa y suaviza la piel, eliminando los signos de fatiga y decoloraciones.
Es algo más viscosa que la anterior, pero no llega a ser desagradable. Se siente cierto efecto tensor a los 8-10 minutos de aplicar la careta, y deja una piel uniforme, joven, despierta, y con el poro cerradito.
La textura del serum es esponjosa, da efecto relleno, y aporta confort y elasticidad.
De esta, quiero una para cada semana, así os lo digo.
Me ha encantado.
Aún me quedan por mostraros algunos productos de Beauty Face, y lo cierto es que, probablemente, los veáis más de una vez más en el blog, porque me están gustando mucho, y mi piel los agradece.
¿Habéis probado ya algo de Beauty Face?¿Conocíais las mascarillas Mooya Complete Effect Pro, potingueras?
De nuevo, vamos a hablar hoy de un producto de la línea de cuidado profesional de la firma polaca Beauty Face, de venta en OnlineCosmeticos.es.
Se trata de un par de mascarillas de la línea Mooya Complete Effect Pro, aunque para abreviar me referiré a ellas como Mooya Pro.
Dentro de esta línea profesional, hemos conocido las mascarillas de colágeno en formato de careta de hidrogel, los parches de colágeno para ojos, y los serums de la línea Active Skin Concentrate. Todos estos productos los podéis revisar accediendo a sus correspondientes enlaces.
Hasta la fecha, estoy muy satisfecha con los resultados de todos los productos Beauty Face que he probado, aunque reconozco que, muchas veces, sus texturas, formatos, y formas de aplicación, me han descolocado un poco; pero, si me atengo a resultados, creo que es hora de eliminar resistencias, y animarse a probar otros protocolos de cuidado facial.
Hoy me voy a centrar en dos de las mascarillas Mooya Pro de las que dispone la marca Beauty Face, y que, cómo no, también tienen sus peculiaridades.
La línea Mooya Complete Effect Pro es una línea profesional, como os he comentado antes. Es innovadora, y contiene agentes altamente activos para conseguir los mejores resultados. Basándose en la biotecnología, busca un efecto similar al que se obtendría con máquinas, pero sin ser invasivo.
Comprende 8 tipos de tratamiento que contemplan todos los rangos de edad, desde los 25 a los 65 años. En principio, estaremos utilizando unas mascarillas cuyas concentraciones de activos sólo las pueden aplicar profesionales por su alta carga en los mismos; eso sí, en la comodidad de nuestro hogar.
Cada sobre de Mooya Pro contiene una mascarilla en dos fases o pasos.
La primera parte consiste en una careta de celulosa que abarca rostro, mentón, cuello, y hasta orejas, porque tiene un par de troqueles que se insertan en ellas para ajustar la careta al máximo y evitar que se mueva.
Personalmente, a mí estos troqueles me resultan molestos, porque tengo las orejas pequeñitas y muy pegadas a la cabeza, y tener algo tirante en ellas me es incómodo, aunque, una vez a la semana, puede soportarse.
También el fragmento del cuello tiene una posible mejora, y es que, o lo atas tras la nuca, o esos cabos quedan sueltos y se pueden mover si no estás tumbada. En cualquier caso, tener algo frío y húmedo en la nuca a mí no me resulta agradable, al menos, no mientras no haga más calor.
Lo que sí me gusta es que el contorno del ojo queda muy ajustado, y así también se beneficia de la aplicación de la mascarilla durante el uso de la careta.
Por supuesto, estamos irreconocibles con la careta puesta, así que, si no queréis provocarle un ataque a nadie, usadlas cuando estéis solitas, o avisadles antes de entrar en la estancia.
Tonterías aparte, las mascarillas Mooya Pro vienen muy bien impregnadas, tienen buena calidad y no se rompen fácilmente, y la adaptación a la forma del rostro es bastante buena.
Se aplican tras la limpieza de la piel, durante 20 o 30 minutos, y luego se retiran, se masajea el líquido remanente, y prodecemos a descubrir qué se esconde tras el sobrecito número dos.
En realidad, el paso número dos es un serum tipo crema que se puede repartir en varios usos. De hecho, hay producto suficiente como para una semana, más o menos, y sin ser tacaña en la aplicación. A mí, esta parte de serum cremoso, es la que realmente me da la sensación de mascarilla, y tener mascarilla para casi toda la semana, de esta calidad, con un solo sobre, me parece estupendo al precio que tiene (7,99€)
Tiene un tacto parecido a una crema microaireada, casi de mousse, y, al aplicarla, tiene una sensación parecida a las prebases siliconadas, pero sin el efecto careta que dejan éstas.
Se nota cómo rellena y reconforta la piel al momento, la alisa, la hidrata, y le da un aspecto más joven y descansado.
Con respecto al serum, en la página dice que hay que aplicarlo un máximo de 10 minutos tras la retirada de la careta. Yo no entiendo si es el tiempo máximo a dejar pasar entre careta y serum, o el tiempo máximo de exposición al serum.
En cualquier caso, como tengo tendencia a hacer las cosas como Thor, o el que esté de guardia ese día, me dé a entender, yo suelo aplicarme una capita del serum como si fuera una crema espesita, y dejo que se absorba solita. No sólo no he notado problemas, irritaciones, o sobrecargas en la piel, sino que me la he encontrado estupenda toda la semana.
Respecto a las mascarillas Mooya Pro que he probado, me he centrado en mi principal problema, que suele ser la deshidratación.
Primero probé la Mooya Pro Estimulante de la Acuaporina.
Es una mascarilla antiedad apta para cualquier rango de edad, especialmente destinada a pieles secas, deshidratadas, o con problemas de hidratación.
Estimula la actividad de las acuaporinas, las proteínas mediadoras del transporte de agua de la piel. Así obtenermos una hidratación hacia dentro, y hacia fuera.
Restaura la barrera lipídica, reconforta la piel eliminando la sensación de tensión, hidrata y protege contra la pérdida de agua, mejora la flexibilidad y elasticidad de la piel, la suaviza, la alisa, y le da un aspecto más joven y luminoso, más descansado.
Me fascina el serum de esta mascarilla, me parece de lo mejorcito que he probado. Y, además, cumple con todo lo que promete.
La siguiente mascarilla que he utilizado es la Mooya Pro Relleno Hialurónico +25.
También está especialmente destinada a pieles secas, deshidratadas, o con problemas de hidratación. Se recomienda a partir de los 25 años de edad.
Proporciona una hidratación intensa, reconstruye la capa protectora de la piel, incrementa la firmeza y la elasticidad, disminuye el aspecto de las arrugas finas y superficiales, alisa y suaviza la piel, eliminando los signos de fatiga y decoloraciones.
Es algo más viscosa que la anterior, pero no llega a ser desagradable. Se siente cierto efecto tensor a los 8-10 minutos de aplicar la careta, y deja una piel uniforme, joven, despierta, y con el poro cerradito.
La textura del serum es esponjosa, da efecto relleno, y aporta confort y elasticidad.
De esta, quiero una para cada semana, así os lo digo.
Me ha encantado.
Aún me quedan por mostraros algunos productos de Beauty Face, y lo cierto es que, probablemente, los veáis más de una vez más en el blog, porque me están gustando mucho, y mi piel los agradece.
¿Habéis probado ya algo de Beauty Face?¿Conocíais las mascarillas Mooya Complete Effect Pro, potingueras?